Tras arduas gestiones, la entidad recuperó su identidad y redundará en beneficios para sus socios. Además, entró al registro nacional de clubes de barrios, obteniendo importantes subsidios.

En febrero del año 2008 hubo una suspensión judicial de la asamblea y se ingresó en uno de los períodos más oscuros de la vida institucional. En 2012 se realizó el reempadronamiento, dando cumplimiento con lo solicitado por la Dirección Provincial de Personas Jurídicas. En noviembre del 2014 se solicita la normalización, dando comienzo a la recuperación de la identidad. Durante todo el 2015 se ingresó toda lo documentación contable  correspondiente a los años 2012 al 2015 para obtener el certificado de vigencia. En 2016 se presentó la documentación correspondiente post asamblea y obtener nuevamente el certificado de vigencia de ese año.

Se hizo lo mismo en el año 2017, se obtuvo el certificado de vigencia en la Dirección Provincial de Personas Jurídicas, lo cual ha permitido ponerse a derecho y obtener la exención de ganancias permanente con respecto a la administración general de ingresos públicos – AFIP -, en el mismo sentido se logró también la exención en ingresos brutos con la Agencia de Recaudación de la Provincia de Buenos Aires - ARBA.

Al día de la fecha, el certificado correspondiente al 2018 conjuntamente con el ingreso de la documentación al ejercicio económico 2017 post asamblea, permite al Club cumplir no solo con nuestras obligaciones societarias ante el Estado, sino que nos pone a derecho en beneficios. Desde poder abrir una cuenta bancaria, hasta obtener un ahorro de unos 70 mil pesos anuales para el club. Ferro pagaba ingresos brutos hasta el año pasado y se llegaron a pagar multas por mora.

La personería ha permitido que el club esté inscripto en el registro nacional de clubes de barrios, obteniendo subsidios en energía eléctrica y gas aproximadamente un 40 % del consumo.

Otro beneficio que se abre por haber obtenido nuevamente la personería o “haber recuperar la identidad”, como lo dijo muy bien el expresidente Ezequiel Lester en la asamblea de diciembre del 2016, se va a comenzar a cobrar la cuota social por debito automático o con tarjeta de crédito, en beneficios de todos los socios.

Con esto, no solo se le está dando dignidad con los servicios básicos y recuperando espacios que se habían dejado de usar, sino que el tricolor volvió a tener una identidad como institución.

Ferrocarril Sud agradece al estudio contable de Tino Lemma por su enorme colaboración.