El concejal del Justicialismo, Facundo Llano, y el dirigente del Movimiento Evita, Nicolás Carrillo, mantuvieron una reunión de trabajo con el presidente de la Cámara Empresaria de Tandil, Agustín Usandizaga, y demás integrantes de la comisión directiva, en el marco de las acciones impulsadas a partir de la sanción de la Ordenanza Micaela.

Dicha normativa propicia la adhesión de las entidades intermedias a la capacitación obligatoria en las temáticas de género y violencia contra las mujeres que se implementará en Tandil para el personal y funcionarios y funcionarias municipales.

Durante el encuentro, se conversó sobre las cifras actuales de femicidios y las denuncias por violencia intrafamiliar y de género. Además, se abordaron los tipos y modalidades que adquiere la violencia de género, haciendo hincapié en la que se produce en el ámbito laboral, los proyectos de reforma de la Ley del Trabajo para la incorporación de la licencia por violencia de género, las dificultades que atraviesa una persona que la padece, la necesidad de establecer mecanismos internos de abordaje y eventual derivación, de acompañamiento, y sobre todo de prevención, en el marco de la legislación nacional e internacional vigente.

Particularmente, se dialogó sobre los datos que surgen del último informe del Instituto Nacional de las Mujeres sobre los casos de violencia laboral y de la Oficina de Asesoramiento sobre Violencia Laboral del ex Ministerio de Trabajo de la Nación, donde se señala que el 65 por ciento de los casos denunciados, representan situaciones de acoso en el lugar de trabajo y que ello lo relacionan con los patrones socioculturales que rigen nuestra sociedad.

En relación a la cronicidad del maltrato, en el período bianual, que comprende los años 2017 y 2018, se destaca que el 55 por ciento de mujeres que atravesaron violencia laboral ha sido durante un período menor a un año, mientras que el 35.6 por ciento transitó situaciones de maltrato entre 1 y 5 años.

En cuanto al vínculo con el agresor, en el período bianual, el 50.36 por ciento de las mujeres en situación de violencia laboral refieren que la persona que la agredió fue su superior a cargo y el 49.6 por ciento ha sido registrado bajo el vínculo “otros”. Ahora bien, focalizando el análisis en esta categoría, se ha detectado que en una gran proporción de los casos, los agresores son compañeros de trabajo.

Al respecto, Carrillo señaló que “las mujeres trabajadoras que sufren violencia en su lugar de trabajo se ven doblemente afectadas no sólo por las consecuencias en la salud, sino en su autonomía económica”.

Frente a ello, manifestó que “es necesario no sólo formarse para prevenir y comprometerse a erradicar la violencia, sino para adecuar los dispositivos con los que hoy cuentan para atender y resolver estas situaciones porque no hacerlo puede implicar que quienes padecen violencia se vean obligadas a renunciar, cambiar horarios o turnos de trabajo, o lo que es peor sufrir un castigo siendo despedidas”.



Por su parte, Llano aseguró: “estamos comprometidos con la difusión de esta herramienta que prevé la formación para prevenir y erradicar la violencia y por ello seguimos buscando sumar adhesiones porque también resulta necesario trabajar en ámbitos que exceden al Estado, porque las alarmantes cifras sobre la violencia y la complejidad de la problemática lo requieren”.

En tanto, Carrillo recordó que “la ordenanza, al igual que la ley, fue impulsada por las compañeras del Movimiento Evita en primer lugar en honor a Mica García que militaba a diario por una sociedad mejor y libre de violencia, pero además porque estamos convencidos y convencidas que una problemática tan compleja como es la violencia de género necesita de acciones concretas porque nada parece alcanzar para disminuir las cifras de femicidios y hechos de violencia contra las mujeres y trans”.

Destacó luego la buena recepción de las autoridades y los asociados de la Cámara Empresaria de Tandil. “Se mostraron muy interesados ante la propuesta de capacitación en género para saber cómo abordar las distintas problemáticas que se dan en los espacios de trabajo. Acordamos seguir dialogando y ellos, por su parte, se comprometieron a generar una reunión de la comisión directiva para aprobar la adhesión de la institución a la ordenanza y avanzar con un esquema de capacitación interno”, precisó el dirigente del Movimiento Evita en Tandil.

Por último, ambos adelantaron que seguirán difundiendo la ordenanza entre sindicatos e instituciones intermedias que deseen adherir al compromiso de prevenir y erradicar la violencia.

Para ello, anunciaron que realizarán jornadas de formación y debate, “porque la violencia de género es una expresión manifiesta de las históricas desigualdades entre varones y mujeres que finalmente se reproducen en la sociedad”.

La normativa

Luego de la sanción de la Ley Nacional 27499, conocida como “Ley MICAELA”, el 8 de marzo de 2019 se aprobó en Tandil la Ordenanza 16463, presentada por el edil Facundo Llano a partir de la propuesta realizada por las mujeres del Movimiento Evita de Tandil.

Dicha normativa lleva el nombre Micaela en conmemoración de Mica García, una militante del Movimiento Evita de Entre Ríos que fue violada y asesinada por el femicida Sebastián Wagner en abril de 2017.

También la Provincia de Buenos Aires adhirió a la ley nacional, aunque se desconoce la reglamentación de la misma.

La normativa establece la capacitación obligatoria en las temáticas de género y violencia contra las mujeres para la totalidad del personal (incluido funcionarias/os) de los tres poderes del Estado.