Este fin de semana la sala de teatro independiente Bajosuelo, ubicada en Rodríguez 457, ofrecerá una variada propuesta. El viernes a las 21 se presentará Impromondo, espectáculo de improvisación, con entrada gratuita.

Impromondo es una invitación al juego, un espectáculo en donde actores y espectadores se someten al aquí y ahora más sincero. A partir de las propuestas del público, los improvisadores van recorriendo lugares, situaciones y vínculos disparatados, confiando en el presente y dejando que lo ridículo y lo absurdo aparezca, crezca y se expanda.

El espectáculo es siempre una oportunidad para jugar y dejarse sorprender, porque nada se repite y cada función es distinta a la anterior. Disfrutarlo es único y siempre divertido. Impromondo es un salto al vacío. La edad recomendada para disfrutarlo es a partir de los doce años.

Los improvisadores son: Clara Giorgetti, Marianela Vallazza, Gastón Dubini y Winny Ferraro. Y la música en vivo está a cargo de Pablo Martínez. Este espectáculo es a la gorra.

El sábado a las 21 se subirá a escena La 45, de Cecilia Propato, con dirección de Carolina Giovanini, la producción de Edit Anahi Rondinone y las actuaciones de Yamile Amad y María Ines Odriozola.  La obra presenta dos mujeres policías que se conocen compartiendo la jornada laboral.

En tanto crece la relación entre ellas, que parecen convivir en mundos diferentes, se muestra que ambas están identificadas por la violencia. Grace y Rebecca se descubren, se compensan, se entienden, se desean.

De algún modo también buscan sustraerse del circuito de la injusticia y la violencia a través de un universo donde cabe el sueño revelador. Esa búsqueda de salvación, no obstante, tendrá el límite que impone una sociedad donde el machismo sigue llevándose puestas muchas vidas.

Combinando dosis precisas de humor y tragedia se conforma este melodrama de violencia conyugal, mostrando una problemática muchas veces silenciada e ignorada.

El domingo a las 19 el público podrá disfrutar de Pater, la obra interpretada por el Grupo de Teatro del Borde, de la ciudad de Las Flores, que narra la historia de un padre que pierde a su hijo a la salida del jardín de infantes y arriba al despacho de dirección de la institución, contrariado y angustiado, en busca de ayuda para encontrarlo. Allí lo reciben la directora y su asistente, que lo llevarán por un camino lisérgico hacia una resolución absurda e inesperada.

Según señala la crítica especializada, la obra es “sarcástica, humorística, erótica, con toques de realidad. Sus actores logran entretejer satíricamente los avatares de un sistema educativo por demás desbordado, burocrático y en crisis”. Una comedia grotesca, con mucho de absurdo, que propone una mirada crítica y delirante sobre el sistema educativo.

El espacio teatral Del Borde cuenta con el apoyo del Instituto Nacional del Teatro y el Consejo Provincial de Teatro Independiente.