La institución educativa que depende de la Universidad Nacional del Centro informó que se desarrollará desde el 28 de octubre y hasta el 1 de noviembre.

De este modo la Escuela Nacional Ernesto Sabato “recuerda, promueve y difunde la obra de Ricardo Garijo, importante artista y querido docente de la escuela, a 66 años de su nacimiento y 10 años de su fallecimiento”.

Tandil ha sido y es una ciudad de grandes artistas, en este caso Ricardo no solo es uno de ellos, sino que ha transitado y compartido su pasión en la Escuela con alumnos, alumnas y colegas.

No solo es nuestro recuerdo de su entrañable persona lo que promueve este homenaje, sino la calidad de su obra y la decisión de acercarla a toda la comunidad educativa. Esta Muestra constituye, además de un merecido Homenaje, un compromiso en ese sentido.

El acto de inauguración se realizará en la Escuela el lunes 28 de octubre a las 11 horas y será abierto a todo público.

Durante la muestra se expondrán algunos de sus dibujos, sus obras literarias, algunas curiosidades (como una serie de tarjetas coleccionables publicadas en el exterior, entre otras) y algunas de las producciones realizadas por alumnas y alumnos en relación a su obra.

Sobre Ricardo

Garijo nació el primero de diciembre de 1953 en Tandil. Fue el segundo hijo de una pareja de inmigrantes que llegaron a la Argentina escapando del horror. Durante la Segunda Guerra Mundial su madre fue una activista de la célebre "Resistencia Francesa", al tanto que su padre fue un sobreviviente de la Guerra Civil Española y luego del campo de concentración nazi "Mauthausen".

Estas historias marcaron rápidamente al joven Ricardo que creció escuchando los relatos de su padre y leyendo ciencia ficción, dos ejes que marcaron su obra.

Cuenta su historia que aprendió a hablar en inglés viendo películas norteamericanas y escuchando The Beatles. Al mismo tiempo que descubrió tempranamente su habilidad para el dibujo.

Resulta difícil sintetizar su prolífica y multifacética producción sin omitir hechos, reconocimientos, y anécdotas imprescindibles para comprender su obra y su carácter.

Como historietista fue publicado en Inglaterra, Escocia y Estados Unidos (editoriales para las que trabajó hasta sus últimos días), además de la popular tira Lomax que apareció en el diario La Razón de Buenos Aires por los años 80.

La publicación del álbum "Diario de Plaza Moreno", a fines de 2002, una colección imperdible de 9 historias fantásticas sobre Tandil, escritas junto a Raúl Echegaray.

De su trabajo junto a Raúl se publicaron, entre otras, la revista "Historietas Bonaerenses", editada por la Subsecretaría de Cultura de la Provincia de Buenos Aires en 1999 e "Historietas en la Biblioteca" en 2001, conteniendo trabajos de sus alumnos.

Con las novelas El fuego, Los cielos de piedra y el cuento Los trenes, todos textos premiados, sorprendió demostrándonos que también era un gran escritor de estos géneros.

Los cielos de piedra y Los trenes, merecerían un texto aparte, por ser obras tan especiales para él, sobre el final de su vida, en las que logra unir el amor por su padre, la literatura y la memoria histórica.

Fue docente de la Escuela Nacional Ernesto Sabato junto a Raúl Echegaray durante los años iniciales de la misma. Ambos estaban a cargo del Taller de Historietas. De ese taller algunas alumnas y alumnos descubrieron una pasión, todos y todas tuvieron el placer de asistir a unas clases muy particulares, creativas y colmadas de un humor especial.