El proyecto de la huerta comunitaria agroecológica de La Movediza, iniciado hace algunos meses por el Municipio, el INTA y la Secretaría de Agroindustria de la Nación, continúa creciendo y ya cuenta con la participación de quince familias.

Funciona en un predio de 2 mil metros cuadrados especialmente preparado y acondicionado por los propios vecinos, con el acompañamiento de las instituciones que impulsan la iniciativa y busca promover el desarrollo individual y colectivo de las familias de esa zona de la ciudad.

Además con la generación de este espacio, las autoridades pretenden promocionar la participación de los vecinos en la producción de alimento, mejorar la calidad de las dietas, generar un acercamiento a la jardinería y el trabajo en contacto con la naturaleza, facilitar el protagonismo de los vecinos en su comunidad, reducir el gasto familiar en la alimentación y crear ingresos para las familias con la venta de parte de lo producido.

Los integrantes de las familias que participan están divididos en grupos y asisten a la huerta durante la mañana o la tarde en diferentes días.



La Secretaria de Desarrollo Humano y Hábitat, Alejandra Marcieri, explicó que “este proyecto es parte de lo que nos pide el intendente Lunghi, generar políticas públicas de desarrollo comunitario junto a las instituciones de la comunidad y otros organismos, en el marco del modelo de gestión asociada de Tandil. En esta primera etapa lo producido es para autoconsumo de las familias que participan. Pero la idea es que cuando se empiece a producir a mayor escala, algo que tiene que ver con las condiciones climáticas y el acondicionamiento de la huerta, empezar a comercializar el excedente de lo producido y generar un ingreso para las familias”.

“En los últimos días terminamos de colocar el sistema de riego por goteo lo que permitirá aumentar la productividad de la huerta y en poco tiempo haremos una jornada de visibilización de los productos que se llamará De la huerta a la mesa. Allí presentaremos picadas saludables y ofreceremos degustaciones, porque la intención en una etapa futura es elaborar alimentos envasados o conservas de los productos que se cosechan en la huerta”, agregó.

Además detalló que “actualmente hay quince familias trabajando en la huerta y seguimos recibiendo solicitudes de ingreso, así que estamos evaluando replicar este modelo en otros espacios”.

Finalmente destacó el trabajo conjunto de todas las partes que impulsan el proyecto y el compromiso y ganas de las familias que participan, “algunas de las cuales ya eran acompañadas por la secretaría, y de esta manera continuamos trabajando para que puedan progresar, posibilitando que generen de forma natural parte de sus alimentos y un ingreso económico con lo que se puedan comercializar”, precisó.