La Cámara Empresaria lanzó una “carta abierta” para el Gobierno Municipal y Provincial

La Cámara Empresaria lanzó una “carta abierta” para el Gobierno Municipal y Provincial para manifestar su “preocupación” ante las limitaciones de las actividades comerciales en la Fase 2.

En la misiva afirman lo siguiente:

Con una preocupación que a esta altura de las circunstancias se torna en un estado agobiante, nos urge la necesidad de plantear nuestro desacuerdo con la resolución de las autoridades provinciales que vuelve a limitar las actividades comerciales, a la cual ha adherido el Municipio de Tandil.

Como siempre, nos acompaña aquella misma intensidad anímica para reiterarle que mantenemos y mantendremos la vocación de colaborar con todas las autoridades –sean municipales, provinciales o nacionales- en la prevención sanitaria y en la lucha para contener y derrotar a la pandemia.

Y si es posible, aportar soluciones.

Pero en lo inmediato creemos que es absurdo sobrellevar esta vez un esquema de cumplimiento imposible que impone a los comercios no esenciales atender de la puerta hacia afuera a los clientes en medio de un clima invernal que precisamente actores de la política han propuesto se tome en cuenta a la hora de la facturación de gas por las bajas temperaturas.

Asimismo, resulta impracticable para los negocios retrotraerse a las limitaciones horarias de principios de la pandemia, entre otros obstáculos que empujan al comercio hacia un estado de virtual quebrantos masivos, e inefectivo cuando está constatado que los contagios provienen, en su mayor medida, de las reuniones sociales y no de la actividad comercial.

En virtud de todo eso (y otros tantos motivos) reiteramos la intención de colaborar e intentar ser parte de la solución ante una problemática global que, evidentemente, no se puede resolver en forma unilateral ni bajo un enfoque exclusivo.

Ante eso acudimos a su reconocida capacidad de saber escuchar los reclamos de la sociedad y de evaluar otras alternativas, como, por ejemplo, en estas circunstancias, la de establecer determinados cupos dentro de los locales y evitar que los clientes queden a la intemperie y retomar a ciertas disposiciones anteriores que habían comenzado a mostrar algún mejor resultado con el correr de los días, bajo el compromiso férreo de nuestro sector.

Sería redundante enumerar otras imposiciones reglamentarias impracticables y el profundo menoscabo que trae el decreto en cuestión a cientos de negocios tandilenses.

Por eso solicitamos puedan rever en forma urgente el acompañamiento a nivel local a las disposiciones de las autoridades provinciales.