Desde hace varias semanas, ante la escasez de alimentos y el deterioro en la calidad de los mismos, la preocupación en nuestros barrios viene creciendo. Desde el lunes tuvimos que suspender el trabajo comunitario en nuestros barrios, ya que no había insumos para cocinar y darle el almuerzo a las cientos de familias que se acercan a diario.

El martes 3 de mayo nos juntamos con Ariel Risso, titular del CDR con el objetivo de resolver esta situación y volver al funcionamiento normal de nuestros espacios.

Sin embargo, la preocupación por este tema se sostiene, ya que a nivel municipal, la política de alimentos tampoco reconoce el labor de las organizaciones que frente a esta crisis y durante la pandemia pusimos el plato en la mesa de muchos vecinos y vecinas.

Queremos que el estado, en todos sus niveles reconozca la importancia del trabajo comunitario, y el esfuerzo por garantizar que cada vecino de la ciudad tenga un plato de comida, por esto exigimos más volumen de alimentos y de mejor calidad.